Ella quiere una vida normal, pero ser la heredera de un imperio criminal no es fácil Nada de pistolas en la mesa a la hora de cenar. Esa es mi única regla. Daisy Haites siempre ha querido una vida normal, pero eso no es posible para la heredera del imperio criminal más infame de Londres. Fue criada bajo la atenta mirada de su hermano Julian, un capo de la mafia desde el asesinato de sus padres.
La vida de Daisy es complicada, y las cosas empeoran cuando se enamora del guapo y distante Christian. Él está enamorado de Magnolia Parks, la novia de su mejor amigo, y usa a Daisy para jugar al despiste, hasta que ella empieza a colarse de verdad en sus sentimientos.
A medida que los hilos que los unen se enmarañan, descubrirán que todo en esta vida tiene un precio.